Veranos secos, inviernos templados y poca abundancia de lluvias caracterizan el clima de Formentera. Además, las pequeñas dimensiones de Formentera, así como la escasa entidad de su relieve, hacen que las características climáticas varíen muy poco de un lugar a otro.
La bondad de su clima (16º de media entre noviembre y abril) permite bañarse en el mar durante todo el año y la isla, sobre todo en otoño y primavera, ofrece su mejor aspecto para disfrutar de su magnífica luz e increíble color y sus cristalinas aguas turquesas.